Bajé las escaleras, sí, de dos en dos.
Perdí al bajar el norte y la respiración.

Soffrirò... morirò...

ma intanto

sole, vento, vino, trallallà.

Lástima que llegara aquel vendaval y salieras volando.
Lástima que empezara a diluviar y salieras nadando.

Que los días que tienen que venir abran ventanas a la esperanza.
Este puede ser un buen comienzo, este puede ser un buen principio, Principio de Incertidumbre.

Es obvio que el futuro está lleno de amenazas, de riesgos, de inseguridades, pero yo creo (de creer en y de crear), para mi uso personal, un cielo despejado.

- No sé. No creas que es tan simple. A lo mejor mi cabeza te haría reproches, pero creo que mi vientre te querría igual. ¿Sabés una cosa? Mi cabeza puede atenerse a principios, y hasta asumir compromisos. Pero para mi vientre vos sos mi único compromiso. Lo que pasa es que es un vientre leal ¿no crees?. [...]

Y la volvió a abrazar. Esta vez sin otra intención que saberla cerca, y sentir de paso la lealtad de aquel vientre.

Ante una vida absurda sólo cabe preguntar: ¿Qué estaré haciendo... BIEN?.

Siendo muy Mariafa.

Una ceremonia de celebración de la vida, bella y efímera, como los altares de flores y los amores de paso. 

Por eso, cuando vi que llovía, pensé que era mejor, porque la inclemencia exterior reforzaría automáticamente nuestra intimidad y ninguno de los dos iba a ser tan idiota como para pasar de trompa y en silencio una tarde lluviosa de sábado.

Senti che fuori piove,

senti che bel rumore.

Sally cammina per la strada senza nemmeno guardare per terra.
Sally cammina per la strada sicura senza pensare a niente.
Sally cammina per la strada leggera.

Sally è già stata punita per ogni sua distrazione o debolezza.

Sólo quiero que agarres y me cojas fuerte, con caricias.

Que me busques y me encuentres. Que me sueltes y me pierdas.

[Que me quieras sin quererme al fin]

Para curarme de espantos bastan esos besos largos como cuellos de jirafa.
Bastan esos besos largos.

Para evitar más lamentos bastan esos besos lentos como vestidos al viento.

Bastan esos besos lentos.