Quería parar y recrearme en la locura. 

En esta oscuridad, es tu braille locuaz quien lee mi definición.

Rescatar el instante que nos hizo gigantes.

Fue como un licor que baja sususuave y luego arde en tu interior.

Dominar las azoteas es aproximadamente lo mismo que dominar las intimidades.

Para huir, para escapar de algo que uno no sabe bien qué es, hay que hacerlo solo.

Yo no sé cómo hay gente capaz de vivir sin secretos.

Se acercó a la ventana. Miró el cielo. También el cielo lo miró a él.

El altillo, M.Benedetti.

Es tarde... voy de prisa por la vida.
Y mi risa es alegre, aunque no niego que llevo prisa. 
[Retrato, M.Machado]

- Un café... livianito, por favor.

[Como Granada en primavera, como la vida]

La soledad es un precario sucedáneo de la amistad. Yo no tenía muchos amigos. 
[...] No la soledad angustiosa y amarga que después iba a convertirse en mal endémico de mis treinta años, sino la soledad atrayente y buscada, la soledad exclusiva que todas las tardes me esperaba en el altillo, ese reducto hasta el que llegaba el pulso tranquilo de la siesta del pueblo, la siesta total.

M.Benedetti.

Amigos

imaginarios.